XXVIII domingo del Tiempo Ordinario – En el Evangelio, Jesús acaba su parábola con una pregunta desconcertante: “cuando venga el Hijo delHombre, ¿encontrará esta fe en la tierra?”. Tal como va nuestra vida de fe, en unmundo cada vez más encerrado en su propia visión de las cosas, hay exigencias delevangelio que sin fe y oración difícilmente seremos capaces de asumir. Tenemos quepurificar nuestras intenciones y crecer en una actitud de humilde confianza, la actitudde los que saben “orar su vida” ante Dios.
Domingo, 12 de octubre, 2025 | Homilía Pbro. Carlos Chavarría
